La práctica del yoga te acompaña en esta nueva vida, redescubriéndote, en conexión con tu bebé para disfrutar serenamente y compartir un espacio respetuoso.
También acompaña a tu cuerpo, sin prisas, de vuelta a su estado preconcepcional.
Como recomendación general, se sugiere esperar de 5-6 semanas de la fecha del parto, si ha sido vaginal.
En el caso de cesárea, la recomendación se extiende a un periodo de entre 8-10 semanas.
En ambos casos se debe contar con aprobación médica, y no es necesario haber practicado yoga previamente.